Que las mujeres estén en altos puestos directivos es como cazar mariposas
La diversidad en el liderazgo puede ser un desafío o también puede ser una realidad natural. Tanto si piensas una cosa como la otra, estás en lo cierto.
Hace unos días, un cliente de coaching ejecutivo me expresó su deseo de hacer un equipo 50-50 entre hombres y mujeres. Había hablado con varios head hunters (todos hombres) para los puestos de dirección general y le habían dicho que eso era imposible.
Imposible.
Le pregunté qué podía hacer que encontrar mujeres fuera imposible. ¿No hay mujeres? ¿Solo hay hombres?
Y terminé con la siguiente reflexión que os comparto: La única opción no siempre es salir a cazar. A veces es mejor pensar en la estrategia como la mejor manera de cazar mariposas.
Si ahora mismo sales a las calles de tu ciudad esperando encontrar mariposas para cazar, probablemente te frustres y pienses que no hay. Que es imposible encontrar. Pero ¿es verdad que no hay o es que no estás buscando en el lugar adecuado?
Imagina que, por un casual, un día encuentras una. Si intentas coger una mariposa rápidamente con las manos, probablemente pasen dos cosas: o no lo consigas porque se te escape o que por la fuerza de tus manos en afán de atraparla, termines dañándola. Y estás de nuevo sin mariposa. Casilla de salida.
¿Y si hay una manera más eficaz de coger, no una, sino decenas de ellas?
La clave no es tener mariposas sin más, sino tener un jardín que atraiga a las mariposas. Crear un hábitat en el que realmente encuentren fuente de alimento, un ecosistema en el que poder crecer. Las mariposas necesitan de plantas polinizadoras, lugares cálidos y soleados para descansar y recuperar energía. Por eso abundan en regiones tropicales y de climas cálidos con abundante vegetación. El azul es el color favorito de las mariposas, pero si quieres tener tu jardín lleno de sus aleteos, opta por tener macetas con flores rojas, naranjas, rosas y amarillas. Como se alimentan de néctar, planta tus flores al sol para que las mariposas se alimenten sin perder la temperatura. Crea un mariposario.
Cuando pensamos en atraer talento femenino a puestos ejecutivos, y lo reflexiono también desde mi propia experiencia como mujer y lo que yo misma experimento y necesito, es fácil caer en la mentalidad de salir a cazar: buscar rápidamente y tratar de capturar. Cuando trabajo en sesiones de coaching ejecutivo con mis clientes, soy de dedicar tiempo a afilar el hacha y trazar una estrategia holística, más que de plantear pasos y planes de acción por accionar rápido, sobre todo cuando se trata de formar un equipo desde cero, pues será la base que construirá y sostendrá todo y que marcará la cultura que se respirará en la organización. Esta estrategia rápida me hace pensar que, como intentar atrapar mariposas con las manos, puede no ser tan eficaz. Siguiendo con mi metáfora, o bien no logramos encontrar lo que buscamos o el proceso daña las posibilidades de construir relaciones genuinas y sostenibles.
Las mariposas no aparecen por casualidad, necesitan un entorno que las nutra y las atraiga. De la misma manera que para fomentar la presencia de mujeres competentes en altos cargos, necesitamos crear un ecosistema empresarial donde puedan prosperar. Un jardín como ecosistema laboral.
¿Qué necesitaremos para nuestro mariposario?
Espacios Soleados: Una Cultura Inclusiva
Las mariposas buscan lugares cálidos y soleados para descansar. En el mundo corporativo, esto se traduce en una cultura de trabajo que valore y respete las diferencias, que sea flexible y que promueva el equilibrio entre la vida laboral y personal.
Plantas Polinizadoras: Oportunidades de Desarrollo
Las mujeres necesitan ver caminos claros hacia el liderazgo. Esto incluye programas de desarrollo profesional, capacitación en liderazgo y mentorías que las apoyen en cada etapa de su carrera.
Flores de Colores: Reconocimiento y Visibilidad
Al igual que las mariposas son atraídas por colores vibrantes, las mujeres necesitan ser visibles y reconocidas en sus contribuciones. Esto implica desafiar los sesgos inconscientes y crear políticas de reconocimiento justas.
Néctar: Compensaciones y Beneficios Equitativos
Las mariposas buscan fuentes de alimento sostenibles. En el entorno laboral, esto significa ofrecer salarios equitativos, beneficios competitivos y oportunidades reales de ascenso.
Transformar la Estrategia: De Cazador a Jardinero
Pasar de una mentalidad de “cazar” a una de “sembrar” requiere un cambio profundo en cómo las empresas abordan el reclutamiento y el desarrollo de talento. Y en el momento de atraer talento preguntarnos honestamente: ¿estamos teniendo posibles sesgos de género? Existen multitud de sesgos psicológicos inconscientes, es normal, el primer paso es identificarlo para que el inconsciente no controle nuestras decisiones o le acabaremos llamando destino, como decía Jung. Y esto no parte solamente de los rrhh, requiere de un compromiso desde el CEO. Los liderazgos empresariales deben ser los jardineros principales, comprometidos a largo plazo con el cultivo de un entorno diverso.
Crear un jardín no solo atraerá talento femenino, sino que también enriquecerá a toda la organización. Crearemos un ecosistema vivo y más resiliente. Y un equipo diverso es más innovador, más adaptable y mejor preparado para enfrentar los retos de un mundo cambiante.
En lugar de frustrarnos ante lo “imposible”, os animo a que transformemos la narrativa. Que dejemos de perseguir mariposas y comencemos a construir jardines. Porque cuando el entorno es el adecuado, las mariposas siempre llegan.
Os deseo a todos un “Feliz reclutamiento” (qué poco me gusta esa palabra que me suena a ejército) y un Feliz 2025.
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